María Catarineu analizó la labor del argentino en Monza. El detrás de escena del fin de semana, las divertidas anécdotas, el fervor del público y lo que viene: ”Estamos aquí y no nos va a echar nadie”.
miércoles, 4 de septiembre de 2024 - 8:04Franco Colapinto debió prepararse de lleno para su debut en Fórmula 1 en 72 horas. El martes 27 de agosto se confirmó que iba a correr las últimas nueve fechas de la temporada con el equipo Williams. Pero unas pocas horas de simulador le alcanzaron para poder tener su bautismo de fuego y nada menos que
en el Autódromo de Monza, sede del Gran Premio de Italia. El primer piloto argentino en correr en la Máxima en 23 años terminó en el 12º puesto y lo demostrado durante todo el fin de semana arriba y abajo del auto fue más de lo que esperaban en la escudería inglesa.
El pilarense de 21 años fue el elegido para reemplazar a Logan Sargeant, quien perdió su lugar como piloto titular debido a los malos resultados y la gota que rebalsó el vaso fue el haber destrozado el auto tras un choque en la práctica libre 3 en Zandvoort, en el GP de los Países Bajos. Sin embargo, el talento, las miles de horas en el simulador y un circuito que conoce muy bien como Monza (allí ganó en la Fórmula 3 en 2022 y 2023), le valieron una rápida adaptación a Colapinto.
Llegó a ser noveno en la tercera práctica y en clasificación no pudo avanzar al segundo corte por un error al tener un leve despiste en la curva de Lesmo. Pero eso le valió un elogio del jefe de Williams, James Vowles, quien aseguró que “hablé con Franco sobre la maniobra en la clasificación, y le dije que no hay muchos pilotos que hubieran salvado el auto como él lo hizo, porque el golpe contra el piano fue muy fuerte”.
En carrera largó 18º, avanzó cinco lugares en pista con tres sobrepasos, a Lance Stroll (Aston Martin), Valtteri Bottas (Sauber), Pierre Gasly (Alpine) y luego ganó otra posición por el toque entre Nico Hülkenberg (Haas) y Yuki Tsunoda (Racing Bulls). Después saltó otro puesto por la penalización de diez segundos a Daniel Ricciardo (Racing Bulls).
Tuvo una sola parada en los boxes y supo administrar la goma dura durante 37 vueltas, un compuesto que nunca había usado en la F1. En su vuelta a pista en un giro fue más rápido que el resto. Apenas había dado 8 vueltas seguidas arriba de un auto de la categoría en los ensayos y este domingo dio 53. Llegó al final con buen ritmo, al punto de marcar su mejor registro en la ronda final en la que también superó a su compañero equipo, Alex Albon (1m23s728 / 1:23.918). Ya en una carrera logró mejorar 13 resultados de Sargeant en sus 14 presentaciones, donde su labor más destacada fue un undécimo puesto.
Eso es lo que se vio. Lo que no se vio se lo contó a Infobae la manager del corredor, quien afirma que “es lo que siempre trabajamos, soñamos y lo pudimos conseguir”. Sobre la labor de su pupilo afirma que “superó las expectativas de Williams. Una tenía que ver sus caras y te dabas cuenta. Los comentarios que hubo después…”.
“Están muy contentos por la forma de trabajar con sus compañeros y el feedback de todo el equipo. Todos vimos lo que se vio en pista, pero lo que no se vio fue algo que también Williams valoró mucho, que fue su comportamiento durante todo el fin de semana”, destaca la española que trabaja con Franco desde 2018 y junto a su pareja, el ex piloto escocés Jamie Campbell-Walter, es una de las responsables de Bullet Sport Management.
Franco tiene contrato como titular hasta final de temporada. Luego seguirá ligado al equipo, pues hay un programa de pruebas de 6.000 kilómetros arriba de autos de dos temporadas atrás. Pero lo demostrado en Monza invita a ilusionar con que hay Colapinto para rato en la F1. Si bien es cierto que Albon y Carlos Sainz tienen contrato para el año próximo, siempre hay cláusulas de salida. No solo la única opción es 2026. Habrá que estar preparado para un escenario que lo pueda ubicar como titular en 2025.
Pero más allá de las especulaciones hay una realidad, y es que el argentino sorprendió a propios y extraños. Todo el ambiente de la F1 quedó impactado. Y en Williams saben que lo deben cuidar más allá de la chance que le están dando ahora y todas las que le brindaron desde enero de 2023, cuando fue incorporado en su academia de jóvenes pilotos.
“Hace dos semanas no teníamos asiento y hoy lo tenemos. ¿Por qué no lo vamos a seguir teniendo? Veremos. Nosotros tenemos que seguir trabajando como hasta ahora, con humildad, carrera a carrera”, explica María y avisa que “tengo a Jamie preparando todos los planes, pero nuestro trabajo con Franco es ‘de acá no nos saca nadie. Estamos aquí y no nos va a echar nadie’”. Su afirmación apunta a la actitud positiva de haber demostrado que su piloto estuvo a la altura de las circunstancias.
Otro tema no menos importante va más allá de la calidad del piloto, algo irrefutable. Es el aluvión del público argentino y en Brasil se espera una explosión popular en el Autódromo de Interlagos, el próximo 3 de noviembre. “Sorprendió la reacción en Argentina y la gente que lo fue a alentar. Fue todo bastante impresionante. Con Charles Leclerc (ganador con Ferrari en Monza) hubo tres personas que casi lo llevaron en andas una vez terminada la carrera por la locura que se desató. Con Franco pasará algo parecido en San Pablo”, indica María.