Se realizó una nueva jornada oftalmológica y ya son más de 1.000 comodorenses atendidos en lo que va del año

En el marco de las políticas sanitarias que impulsa la gestión del intendente Othar Macharashvili y a través de la Secretaría de Salud, este miércoles se concretó la jornada oftalmológica en el Centro de Atención Primaria de la Salud (CAPS) del barrio Presidente Ortiz. Además de los vecinos de Km. 5, concurrieron muchas familias de los barrios aledaños de la zona norte de la ciudad.

En relación a la jornada oftalmológica, el secretario de Salud, Jorge Espíndola, explicó que “existe mucha demanda en la mayoría de los barrios, por lo que vamos haciendo una jornada en diferentes Centros de Salud. Hoy la estamos haciendo en Km. 5, y además de dar esta prestación para los niños, estamos con turnos para adultos”.

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Asimismo, “el programa oftalmológico -añadió Espíndola- está abocado a la niñez y a los adultos mayores. Si se detectan situaciones que pueden ser de mayor complejidad, se derivan al consultorio de Belgrano y Sarmiento, donde el especialista puede ampliar los estudios y recetar los lentes”.

El funcionario analizó que se trata de atender “dos edades prioritarias:  en cuanto al niño, para que pueda acceder a la educación y no tenga problemas visuales, y los adultos mayores para que tengan una mejor calidad de vida. Sabemos que no podemos cubrir toda la demanda, hay gente que se queda sin hacer la consulta, pero continuamos y lo hacemos sistemáticamente en todos los CAPS”.

En la misma línea, el secretario de Salud resaltó que “la prestación es gratis, no se cobran los marcos ni las lentes, todo lo hacemos nosotros mientras esté dentro del alcance de este programa”.

Más de 1000 atenciones en 2024

Por su parte, el oftalmólogo Martín Battauz indicó que “nos acercamos a los Centros de Salud para hacer un screening (examen de medición de errores refractivos) de ciertas patologías, para detectar en forma temprana y hacer un seguimiento más específico. Más que nada nos enfocamos en el control de los niños, porque están en una etapa muy vulnerable, en pleno desarrollo visual y entonces cualquier patología que altere la visión puede traerle consecuencias en la vida adulta que son irreversibles”.

En ese sentido, detalló que se realizaron “más de 1000 atenciones en total en casi seis meses y es un número importante, pero la idea es fortalecer la tarea para cubrir la enorme demanda. Se detectaron muchas patologías leves y graves, se recetaron lentes a chicos que jamás han usado, otros que no sabían que tenían problemas y se les indicó tratamientos”.

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El profesional puntualizó que, en el caso del uso del teléfono celular, “produce alteraciones como el ojo seco, que antes no lo veíamos en los chicos. Vienen con los ojos irritados, rojos, picazón, ardor y lagrimeo. Se ha visto que, si pasan muchas horas y tienen una predisposición genética a desarrollar –ejemplificó- una miopía, el uso del celular puede acelerar el proceso, por lo que se recomienda pasar menos horas en los dispositivos y más tiempo haciendo actividades al aire libre”.

En cuanto a las principales consultas, el médico enumeró que se efectúan “controles de ingreso escolar, a personas que usan lentes y vienen a efectuarse un control periódico, a quienes tienen patologías y vienen derivados por su médico de cabecera y consultas espontáneas”.