Se acerca el 2025 y con las internas más importantes resueltas en Argentina el escenario comienza a tomar más forma ¿qué posibles acuerdos tenemos por delante? ¿Quiénes pueden decidir y encabezar listas? Analizamos las posibilidades y aventuramos algunos potenciales cruces para este nuevo período electoral.
miércoles, 13 de noviembre de 2024 - 8:00Por Pablo Riffo Torres
Definir una alianza electoral es menos complicada de lo que se puede pensar. Como en el peronismo, el que asegura el mayor caudal de votos es el que pone el cabeza de lista. A Chubut le toca renovar 2 bancas que pueden resultar clave para la nueva configuración del Congreso y la pregunta es, más allá de los potenciales nombres e interesados, qué tipo de alianzas nos podríamos llegar a encontrar para el año entrante.
Si las PASO continúan vigentes y el cronograma electoral sigue en las fechas que ya conocemos, en mayo más tardar deberíamos conocer las alianzas que conformarán los espacios políticos y sus candidatos y candidatas.
La propuesta para este miércoles es “pesar” el caudal político de cada espacio, medir fuerzas entre las alianzas ya conformadas y hacer futurología sobre las otras posibilidades existentes.
La referencia más directa que se puede usar para este tipo de análisis es el resultado de las últimas elecciones. El hoy gobernador Nacho Torres sacó en 2023 un 35,77% de los votos contra el 33,88% de su competidor directo el ex intendente comodorense Juan Pablo Luque.
Esto tiene por lo menos dos interpretaciones posibles. Por un lado, Nacho dentro de la alianza de gobierno es quien más caudal de votos propios acumula en su corta pero intensa carrera electoral y es por lejos quien más peso propio tiene dentro de la misma.
Esto le puede dar a Nacho la libertad de elegir quién encabeza la lista, en caso de que decida jugar desde su espacio provincial y los recientes gestos en los cambios de gabinete me dan a pensar que quiere a alguien de su propio riñón político como candidato o candidata.
El otro lugar de la lista podría estar en manos de la Unión Cívica Radical, el segundo espacio con mayor representatividad dentro del frente teniendo a su cargo la vice-gobernación y varias bancas en la legislatura provincial.
El remanente de las alianzas con las que gobierna Torres posee una representación marginal. Quizás se puede medir en el caso de Florencia Papaiani que fue detrás de Carlos Linares en 2021 y trabajó en la campaña que lo llevó al Senado y quien integra hoy las filas del gabinete provincial.
La cosa del lado del peronismo se complejiza un poco más. A diferencia de Torres, Luque pasó el último año lejos de la esfera pública y con un poder fragmentado. Si bien existen concejales en Comodoro Rivadavia como diputados y diputadas que responden a su direccionamiento, el rol del exintendente queda desdibujado y es difícil saber si continúa con potencial electoral.
El peronismo se encuentra fragmentado. Con un intendente alineado al poder provincial, un sector integrando las filas del gobierno de Nacho Torres, un sector alineado a la nueva conducción del PJ y una oposición interna amenazando en conformar una línea paralela, la tarea de ordenar el partido detrás de un candidato parece titánica.
A favor de Luque, tal vez, es que está en condiciones de encabezar una lista y su nombre volver a referenciar a un electorado disperso. Torres por otro lado, si bien podría hacer lo mismo, la candidatura testimonial no termina nunca de convencer y se encuentra hoy en el desafío de trasladar su caudal electoral a quien sea que elija como candidato.
El conflicto Luque/Macharasvilli sigue vigente y es interesante lo que relata el colega Saúl Ghserscovici al respecto en esta nota de opinión publicada en abcdiario. Con una pata puesta en la conformación del poder político en Comodoro Rivadavia, pero sin ocupar un cargo público, llegar al Congreso podría devolverle a Luque la posibilidad de jugar con voz propia.
A este análisis hay que agregarle las intenciones de Ana Calara Romero, de volver a ocupar esa banca en 2025 y por qué lado piensa encarar esa candidatura. La posibilidad de que el PRO y La Libertad Avanza cierren filas la posicionaría como una de las favoritas y le quitaría la necesidad de ser bendecida por el gobernador Torres para candidatearse.
Ya lo dijo en Un Millón de Guanacos el diputado José Glinski, Romero maneja mayor independencia del propio Torres y suele votar junto con el PRO más que en favor de la provincia. No es menor el dato que el gobernador decidió delegar la presidencia del PRO Chubut en la figura de Martín Gómez, concejal comodorense, alfil de Romero.
Previo al resultado de la interna del PJ, en Un Millón de Guanacos también, conversamos con Eugenia Alianiello sobre sus intenciones acerca de volver a ocupar la banca que deja en 2025. Antes que la Justicia Electoral oficializara la lista de Cristina Fernández de Kichner al frente del PJ Nacional la actual diputada dijo que esperaba que la banca la siguiera ocupando una mujer, peronista, de la zona del Valle.
Alianiello en esa misma entrevista manifestó su apoyo a la lista que encabezaba Quintela y su oposición a la de Cristina. Habló de robo de avales y cuestionó los plazos para la presentación de los mismos. La Justicia Electoral no estuvo de acuerdo con ninguno de estos argumentos y hoy al PJ Nacional lo preside Cristina.
Hay un tercer actor en juego para analizar en este enorme cuadro conceptual de posibilidades electorales: La Libertad Avanza. Hoy presidida en Chubut por el diputado César Treffinger, el partido de Milei tiene la necesidad de crecer en número de bancas ocupadas en el Congreso de la Nación y sumar un poroto más desde Chubut es clave para concretar este objetivo.
Si bien parece ser una odisea entender qué sucede dentro del partido de Javier Milei como cuenta el colega Pablo Vernazza en esta nota lo cierto es que hay que evaluar qué tan efectivo resulta llegar con una lista que no posea al propio presidente a la cabeza.
Conversando con distintos analistas políticos el resultado económico va a estar directamente relacionado con el resultado electoral que puede tener LLA en la provincia del Chubut. Acá hay dos formas de leer lo que se pone en juego, qué tan responsable es el gobierno provincial de lo que sucede en Chubut y qué tanta responsabilidad tiene de ese presente el Gobierno Nacional.
De esa interpretación va a depender la dirección en la que cada vecino y vecina de la provincia vaya a emitir su voto. Sobre responsabilidades para reivindicar un rumbo, o por el contrario, qué candidato o candidata considera con suficiente fuerza para recuperar perdido.